En caso de fallecimiento de un beneficiario del sistema, sin necesidad de
que se promueva apertura judicial de la sucesión y siguiendo el orden de
llamamiento que se expresará, sus derecho-habientes percibirán un subsidio
por fallecimiento, por una sola vez, equivalente a cincuenta jornales o
dos sueldos en su caso.
Este subsidio será otorgado en un plazo no mayor de treinta días a contar
de la respectiva solicitud.
En caso de que el trabajador no tenga derecho a jubilación ASSE podrá
extender el monto del subsidio hasta el equivalente de doscientos jornales
u ocho sueldos en su caso.
El monto de este subsidio no podrá ser superior a quince veces el monto
del salario mínimo nacional en su valor nominal.
El orden de llamamiento será el siguiente:
1) Los hijos menores de dieciocho años y los mayores de esa edad
incapacitados para el trabajo y el cónyuge supérstite.
2) Los hijos mayores de dieciocho años, el padre, la madre y las
hermanas siempre que hubieran estado a la fecha de su fallecimiento
a cargo del causante. Las referencias a padres, hijos, nietos o
hermanos, comprenden cualquiera sea su sexo tanto a los legítimos
como naturales, adoptivos o adoptantes.
Si fueran varios los llamados en el mismo orden, el subsidio se dividirá
en partes iguales entre los que concurran. Solamente a falta de los
llamados en un orden heredan los del siguiente.
La ex-cónyuge que percibe pensión alimenticia del causante a la fecha del
fallecimiento tendrá derecho a percibir la parte proporcional
correspondiente al tiempo que duró el vínculo matrimonial. (*)