Los elaboradores de vino para destilar llevarán un libro de contabilidad
de bodega en el que asentarán las cantidades y tipo de uva recibida, el
vino elaborado, las salidas de vino de bodega y las observaciones que se
estime conveniente.
Dicho libro de contabilidad deberá ser llevado al día, no podrá tener
enmiendas ni tachaduras y será presentado al personal inspectivo toda vez
que este lo solicite.