Visto: la actual situación que vive la ex República Federativa
socialista de Yuqoslavia, derivada de los conflictos interétnicos que
enfrentan a varias de las Repúblicas miembros de la antigua Federación, y
del surgimiento de nuevos Estados que han sido reconocidos por la
comunidad internacional como independientes.
Considerando: I) Que la República ha procedido a reconocer a las
Repúblicas de Croacia y de Eslovenia como Estados soberanos, en tanto se
encuentra a estudio la situación de otras Repúblicas de la antigua
República Federativa Socialista de Yugoslavia;
II) Que el Consejo de Seguridad de la Organización de las Naciones Unidas
ha aprobado,entre otras normas referidas a la situación mencionada, la
resolución 757 de 30 de mayo de 1992 por la que se imponen sanciones al
Gobierno de la República Federativa de Yugoslavia (Serbia y Montenegro),
determinando que la situación en Bosnia y Herzogovina y en otras partes de
la antigua Repúbilca Federativa Socialista de Yugoslavia constituye una
amenaza a la paz y la seguridad Internacionales;
III) Que dicha resolución dispone, en el literal a) del numeral 8, "que
todos los Estados reducirán el nivel del personal de sus misiones
diplomáticas y puestos consulares en la República Federativa de Yugoslavia
(Serbia y Montenegro);
IV) Que la situación mencionada en el Visto de la presente resolución
crea, además, serias dificultades para el normal funcionamiento de la
Misión diplomática y la Oficina Consular con sede en Belgrado;
V) Que debe tenerse presente también que la Cancillería se encuentra
abocada a una reorganización de sus Misiones en el exterior en base a la
política de contención del gasto público instruida por el Poder Ejecutivo;
VI) Que todas estas consideraciones hacen conveniente la clausura de la
Embajada de la República con sede en Belgrado.
Atento: a lo expuesto y a la resolución del Poder Ejecutivo de 3 de
junio de 1992,
El Presidente de la República
RESUELVE: