El que fabrique, importe, venda u ofrezca en venta, arriende o ponga en
circulación decodificadores o cualquier otro artefacto, equipo o sistema
diseñado exclusivamente para eliminar, impedir, desactivar o eludir los
dispositivos técnicos que los titulares autorizados de la señal hayan
instalado, para su protección, será castigado con pena de tres a
veinticuatro meses de prisión.