Deberá proveerse una adecuada cantidad de agua potable o de otra fuente
aprobada por el Instituto Nacional de Pesca con una presión mínima de 1,4
kg./cm².
El agua no potable usada para producción de vapor, refrigeración,
control de incendios y otros propósitos similares debe ser transportada
por cañerías completamente separadas, perfectamente identificables
(preferentemente) con color y de manera que se eviten conexiones con el
sistema de agua potable.