VISTO: la necesidad de fijar el precio de determinadas variedades de uva
a regir para la cosecha 2000;
RESULTANDO:
I) la ley Nº 9.221, de 25 de enero de 1934, establece la obligación del
Poder Ejecutivo de determinar las bases y cifras a los efectos de la
fijación del precio mínimo de la uva a vinificar;
II) el art. 5 de la ley Nº 13.665, de 17 de junio de 1968, autoriza al
Poder Ejecutivo a incrementar los precios de la uva en relación a la
fecha de pago;
III) el Instituto Nacional de Vitivinicultura, creado por ley Nº 15.903,
de 10 de noviembre de 1987, prestó asesoramiento preceptivo para
establecer los precios de que se trata;
CONSIDERANDO:
I) en la especie se seguirá dicho asesoramiento fijando los precios
mínimos para las uvas de la cosecha 2000;
II) es innecesario fijar precios para las variedades de vitisviníferas
consideradas finas, incluída la variedad Moscatel de Hamburgo o Moscatel
Negra, pues si bien se estima de particular interés su cultivo, el
volumen de su producción hace previsible su ágil colocación en el mercado
en forma redituable, en razón de la demanda existente;
III) existen razones de política vitivinícola que ameritan mantener el
desestímulo de la producción de híbridos, de la variedad frutilla, así
como las partidas de uvas que contengan mezclas de vitisviníferas con
híbridos productores directos. Por ello no se fijará el precio mínimo
para estas variedades;
IV) la necesidad y conveniencia de que el Instituto Nacional de
Vitivinicultura, disponga de los mecanismos para asegurar la efectividad
del pago de los precios mínimos establecidos;
V) es conveniente, vincular el ajuste de los precios de la uva al
incremento del precio del vino, de acuerdo con lo establecido por el art.
5 del inciso final de la ley Nº 13.665, de 17 de junio de 1968;
VI) beneficioso establecer que los certificados-guías de circulación de
uva tendrán el carácter de intransferibles así como fijar claramente los
elementos que deben contener los mismos, a fin de tutelar, en forma
adecuada, los derechos del viticultor y realizar un control eficaz de la
uva, efectivamente destinada a la vinificación;
VII) oportuno, autorizar para la zafra 2000, el filtrado y prensado de
orujos y borras, en las condiciones y pautas técnicas que determine el
Instituto Nacional de Vitivinicultura;
ATENTO: a lo dispuesto por las leyes Nº 2.856, de 17 de enero de 1903,
9.221, de 25 de enero de 1934, 13.665, de 17 de junio de 1968, 15.903, de
10 de noviembre de 1987 y art. 285 de la ley Nº 16.736, de 5 de enero de
1996,
EL PRESIDENTE DE LA REPUBLICA
DECRETA:
Artículo 1
Fíjanse los siguientes precios mínimos para las uvas cosecha 2000, con
destino a la vinificación, de las variedades que se mencionan: uvas
tintas (Harriague, Vidiella, Bonarda, Barbera y similares), $ 3.80 (pesos
uruguayos tres con ochenta) el kilo.
Las variedades vitisviníferas consideradas finas (Tannat, Merlot,
Cabernet, Pinot, Gamay, Sirah, Sauvignon Blanc, Chardonnay y similares),
la variedad Moscatel de Hamburgo, las vitisviníferas blancas, (trebbiano,
semillón, ugni blanc y similares); las partidas de uvas que contengan
mezcla de vitisviníferas e híbridos productores directos, los Híbrídos
productores directos, y la variedades Isabella o Frutilla, quedarán en
régimen de libre comercialización en lo referente a su precio de
contado. (*)