El Supremo Tribunal Militar redistribuirá las causas pendientes ante
los actuales Juzgados Militares de Instrucción y Juzgados Militares de
Primera Instancia, entre los Juzgados que mantengan sus funciones, y lo
mismo sucederá con las causas seguidas por las Defensorías Letradas de
Oficio. El Ministerio de Defensa Nacional redistribuirá las causas
pendientes, entre las Fiscalías que no son suprimidas.